SOBRE EL DOLOR DE ESPALDA I

Publicado en el  Verdemente de febrero 2006 (nº 88)

El dolor de espalda es algo muy común y extendido. Es la segunda causa de baja laboral, por detrás de la gripe. Es algo que hemos padecido muchas personas  y con frecuencia. La curación sólo es completa si atendemos al físico pero también a las otras partes de la persona, mental, emocional y espiritual.

Yo como masajista puedo aliviar tu dolor de espalda. Mediante la manipulación de mis manos deshago los nudos y contracturas de tus músculos.

Además, como terapeuta floral te puedo indicar qué estado te está provocando ese dolor, recetando el remedio adecuado para el mismo. Además te puedo indicar qué grabación o creencia puede haber detrás de ese dolor para que realices su reprogramación mental.

Según el doctor Bach, la enfermedad se extiende porque se quiere resolver con medios materiales algo que no es material. La curación verdadera de la enfermedad será atendiendo a la causa de la misma, desentrañando el desequilibrio que hay detrás. Para el doctor Bach, son dos las causa principales de la enfermedad: el desequilibrio entre el alma y la personalidad, y el sentirnos y creernos separados de los demás.

Si piensas que detrás de la enfermedad o malestar hay algo más profundo, que tiene un porqué, hay un problema  que te está pidiendo una solución, algo está llamando tu atención, sigue leyendo. Vamos a penetrar  en lo que puede haber detrás de tu dolor de espalda.

Para Eric Rolf, creador de la “Medicina del Alma”, tras la enfermedad hay un mensaje, que mediante el código del cuerpo y el desarrollo de la intuición,  podemos desentrañar, y de este modo acabar con ese malestar, pues escuchando este mensaje y siguiendo su guía, tomamos las medidas necesarias, el dolor ha cumplido su misión de mensajero y cesará.

Nuestro ser superior nos guía constantemente, pero en esta sociedad actual con tanto ruido, nos perdemos y extraviamos constantemente porque en general no tenemos la costumbre de interiorizarnos, de escucharnos, de conocernos.

La vida nos va guiando, pero estamos tan sordos y cerriles que no escuchamos, y nuestro alma  tiene que subir la voz para que prestemos atención. Aparecerá el malestar, desequilibrio o enfermedad.

Vamos a seguir a Eric Rolf para desentrañar el significado del dolor de espalda.

La espalda es la metáfora del apoyo, como nos sentimos apoyados por la vida.

Él sostiene que “gran dolor de espalda significa no sentirnos apoyados por la vida”.

La columna, como su nombre indica, es una columna, un pilar sobre el que se sostiene el resto del  edificio corporal. Como las columnas o pilares de un edificio sostienen el mismo, a nivel simbólico la columna es nuestro sostén.

Diferenciamos tres partes de la espalda. Tenemos 24 vértebras,  que están diferenciadas, aunque son iguales en estructura y forma, salvo las 2 primeras, sobre las que descansa el cráneo. Para su estudio las vértebras están divididas en cervicales, dorsales y lumbares. No es casual esta división.

Según la zona de la espalda que nos duela, estará afectada esa área de nuestra vida que representa.

La zona cervical se corresponde con el área mental. La zona dorsal con el área emocional. Y la zona lumbar con la parte material o de sustento.

Eric Rolf diferencia según la parte de la espalda dolorida, el tipo de ideas que no nos sustentan, las creencias o grabaciones que no actúan a nuestro favor.

El dolor de la zona cervical representa que las ideas que no nos apoyan se refieren a nosotros mismos y la importancia que nos damos, a nuestra propia valoración. Tenemos ideas que no nos apoyan. La curación consistiría en revisar estas ideas, desecharlas, cambiarlas, reprogramarlas. Son ideas estrechas y obsoletas a renovar. Igual que cuando un jersey se nos queda pequeño nos lo dejamos de poner, las ideas que se nos quedan pequeñas las tenemos que desechar.

El dolor de la parte media de la espalda tendría relación con cómo nos sentimos apoyados por las personas que nos importan. La crítica de alguien que apreciamos nos causa más dolor que la de alguien que apenas conocemos. El dolor en esta zona se corresponde con las relaciones.

Los problemas en la zona lumbar representan puntos de vista limitados acerca del dinero, el trabajo, las obligaciones, tenemos ideas de escasez, dudamos de nuestra capacidad de generar recursos económicos.

En esta parte del cuerpo se encuentran representadas  las energías menos sutiles y más unidas a la materia, está el chacra raíz, que nos recuerda que necesitamos un mantenimiento, una alimentación, nuestro combustible para el vehículo físico.

El dolor lumbar nos indica que tenemos una preocupación económica, un sentimiento de escasez de cualquier tipo, una falta de confianza en nosotros o en la vida en cuanto al apoyo económico o material.

También podemos  considerar cada parte  de la espalda asociada a uno de los tres centros de que habla Paloma Crisóstomo en sus cursos y seminarios de autoconocimiento. Para Paloma tenemos tres centros que hemos venido a desarrollar: el centro de luz o comprensión, el centro del amor o corazón y el centro de fuerza o energía. Podemos considerar que si nuestro dolor es cervical, estará conectado con el centro de la mente y este dolor nos indica que el dolor se debe a una desarmonía de este centro, tanto por defecto (debemos desarrollarlo) como por exceso (la mente se ha apoderado de nosotros).

La curación vendrá por tanto de hacernos conscientes de este hecho y tomar medidas al respecto. La meditación y cualquier técnica que nos lleva al control mental será el camino de la curación.

Como decía el doctor Bach, la enfermedad es para nuestro bien, para indicarnos el desequilibrio y desarmonía en que hemos caído. Así que este dolor cervical será para recordarnos que no somos una mente, que tenemos una mente pero no somos sus esclavos. Sin duda recetaría “castaño blanco” para los pensamientos obsesivos o persistentes, y el “cerato” para conectar con la intuición.

Si el dolor de espalda está en la parte dorsal, en  nuestro centro del amor, significa que lo que nos preocupa, lo que nos está desequilibrando, tiene que ver con nuestras relaciones. Amor, por defecto o falta de amor, o por exceso o amor mal entendido, amor asfixiante o sobre protector. Nuestro trabajo será el desarrollo del amor incondicional, y las flores que pueden ayudarnos serán el “acebo” y la “achicoria”, incluso el “castaño rojo”.

Si nuestro dolor es en la parte lumbar, hará referencia al centro de energía o seguridad. Este dolor nos indica que no tenemos desarrollado el espacio interno, que nos invaden o nos invadimos constantemente.

El dolor nos indica que tenemos que ponernos a desarrollar nuestro centro de energía, nuestra fuerza interior, nuestro poder personal. Sería recomendable tomar “centaura”.

Estas son unas primeras lecturas que podemos hacer cuando nos duele la espalda.

La enfermedad o malestar nos lleva a interiorizarnos, a escucharnos. Es el primer paso de la curación.

La enfermedad es el resultado de no escucharnos y no respetarnos.

La curación tiene dos pasos, el diagnóstico y el tratamiento.

Igualmente la curación espiritual tiene dos pasos, el primero desentrañar el significado de la enfermedad, escuchándonos, y el segundo, tomar las medidas necesarias para salir del estado en que nos encontramos.

Si sólo escuchamos pero no obedecemos, es como si al conducir no respetamos las señales. Es como ver un “stop” y no pararse o ver un “prohibido pasar” y seguir adelante o un “ceda el  paso” pero no respetar  la  preferencia del otro.

Así actuamos, saltándonos las señales. Nos conducimos ciegos a ellas o las vemos pero no las obedecemos. Cuando no respetamos las señales,  actuamos dejando que se imponga la personalidad sobre el alma, el ego sobre el ser. El doctor Bach recomienda seguir los dictados del alma para nuestra curación. Ella es la que sabe,

es nuestra parte verdadera; lo que ocurre es que nos identificamos con la personalidad y dejamos que ella tome el control. Ese es el motivo de la enfermedad, y en la medida en que alimentes el alma con los alimentos del alma de Eric Rolf (oración, meditación, creación, celebración, respiración consciente, contemplación etc.), en la medida que permites su guía, entrarás en un estado de armonía que te hará inmune.