viernes, 29 de diciembre de 2017

PRONÓSTICO 2018

Cada año tiene una energía predominante es la que nos influye a todos y es de la que aquí hablamos.
2018 es un año 11 (2 + 0 + 1 + 8 = 11), que es un número maestro, que quiere decir que es posible que se produzca una elevación de la conciencia a nivel planetario.
Para que las energías maestras se manifiesten, debemos estar todos centrados en la luz y en el amor. El número 11 es un número que da la posibilidad de concertar con la sabiduría, captación de mensajes espirituales, conexión con otros planos de conciencia.
Por ello es posible que te sientas más conectado con tu intuición. Y también que experimentes una mente más clara que conecta con la sabiduría, con la conciencia de la justicia universal, de lo que está bien y lo que está mal.
Este sentido de lo espiritual y de la justicia universal se manifestará en todos los niveles y también en el ámbito de lo político.
Un año 11 puede ser también un año de acontecimientos imprevistos que hagan tomar decisiones de manera rápida. No descarto algún grave conflicto, social o político, de carácter global. Pero será de corta duración, pues la energía del entendimiento y la cooperación es la predominante.

Las personas más afectadas por esta energía 11 serán las que tengan el número 11 en alguna parte de su cuadro numerológico. Es decir, aquellas en cuya fecha o nombre y apellidos se encuentra este número. Por ejemplo, los nacidos un día 11, en el mes de noviembre.
Les afectará también a los nacidos el 10 de enero, 9 de febrero,8 de marzo, 7 de abril, 6 de mayo, 5 de junio, 4 de julio, 3 de agosto, 2 de septiembre o 1 de octubre.
También hay nombres de energía 11 como por ejemplo Jesús o Javier. Todas estas personas estarán sensibles, perceptivas, intuitivas, con momentos de gran inestabilidad. Harán grandes aportaciones en su entorno.
También afectará a quienes tengan en su cuadro numerológico otros números maestros, como el 22 o el 33.
La energía 11 puede hacer posible grandes logros, pero a su vez exige grandes esfuerzos. Así que es un año para seguir trabajando. Esperemos que se puedan dar la condiciones para aprovechar esta energía para ese gran avance que podría producirse. Los de siempre, los que siembran el caos, harán mucho ruido y todo lo posible por evitarlo. Pero si estamos conscientes y permanecemos en un tono elevado, su sabotaje no tendrá efectos

Si no llega a manifestarse por completo la energía elevada del 11 por  haber mucha toxicidad, será un año 2 (1 + 1 = 2). El 2 es la energía de los sentimientos y las emociones y la energía de la ayuda a los demás, de la diplomacia, del entendimiento y de las asociaciones.
Preveo un  mayor entendimiento a nivel social, personal y político que este año que nos deja.  Es posible que surjan movimientos de ayuda a los más desfavorecidos. Pero una ayuda elevada la ayuda del que empodera y no del que crea seres incapaces o dependientes.
El dos es el número de las personas que conciben su vida en pareja, siempre asociados a alguien. Por eso es un año propicio para crear nuevas asociaciones y en el que nacerán nuevas parejas. Si te descubres acariciando la idea de buscar pareja o un nuevo socio para tus proyectos, sin duda ya estás sintiendo la energía 2 que es lo que demanda.
Las personas número 2 serán los primeros en sentir esta energía y los primeros en tener éxito en estos planes.

El año anterior, que era un año 1, tenía el  impulso del principio de ciclo, con ritmo rápido. Este año el ritmo es un poco menos acelerado. El 2 es una energía más reposada que la del trepidante año 1. Aquí empiezan a aparecer las dudas de lo que tan claro veíamos con el ímpetu y el entusiasmo que trae lo nuevo. El dos es una energía más lenta y reflexiva, para sopesar lo que hay que descartar y lo que hay que apoyar. Hay que decidir. El ritmo es más lento. Debemos aceptar el nuevo ritmo.
Se recomienda moderación y sensatez en los gastos.

Es un año favorable para contactos, reuniones, sociedades, estrechar lazos de amor y de amistad  y para reparar vínculos rotos. Por eso no te sorprendas si vuelven a tu vida esas relaciones que han estado un tiempo alejadas por falta de entendimiento. Preveo reconciliaciones.
Y es que el 11 es una energía del entendimiento y del mutuo apoyo el que las hace posible que estas relaciones se renueven. Se acentúa la diplomacia y el tacto y es muy posible llegar a pactos o acuerdos satisfactorios.

Pero no solo nos interesan las relaciones de tú a tú, sino que tenemos muy presente el sentido de lo universal, más que nunca somos conscientes del resto de la humanidad.