Como cada año comparto a través de la Revista “Verdemente” el pronóstico del año que comienza. 2017 es un año de esperanzas, de una calidad mejor que el actual que ya nos deja.
Las esperanzas
están en que es un año 1, (2 + 0 + 1 + 7 = 10, 1 + 0 = 1).
Un año 1 es un comienzo de ciclo, un año de apertura, de entrada de lo nuevo.
Un año 1 es un comienzo de ciclo, un año de apertura, de entrada de lo nuevo.
Y esperanza
además porque el número 17 no es un
número karmático, como sí lo fueron los anteriores. Los números karmáticos nos
hablan de dificultades y este año estamos libres de tales dificultades y con la
energía y el impulso de lo nuevo.
Se trata de un
año afortunado según la estricta lectura numerológica que nos habla de un nuevo
comienzo con más sabiduría y esperanza que el anterior. Habrá personas que no
participen de esta fortuna que trae el nuevo año, pero será por su propia
cerrazón mental, su aferrarse a ideologías que no funcionan y no fluir con la
nueva energía.
Preveo nuevas
ideas prácticas que se traduzcan en ganancias económicas, es un buen año para
los asuntos de dinero.
Los años 1 son
buenos años para iniciar nuevos caminos, así que todas esas personas que
sienten la llamada de emprender no se lo pensarán mucho y se lanzará, pues la
energía les lleva a ellos. Los 1 son dinámicos y emprendedores, arriesgados y
ambiciosos.
Es la energía
de la acción, encaminada a la realización, que tras un buen análisis mental y
con apertura a la intuición, hace posible que tome tierra, se materialice y se
haga realidad. Si estás pensando empezar un nuevo camino ya sabes de donde te
viene esta idea, de la energía de este año 2017 que ya se está manifestando en
algunas personas.
La ágil y
dinámica energía del año 1 hace que todo fluya con facilidad. Todos los atascos
que hemos padecido recientemente ya se quedan atrás y por fin avanzamos.
Seguimos
buscando la Justicia, como hace años que estamos en ellos, buscando un orden
social y económico más justo, tras la terrible crisis. Este año 2016 la
buscamos donde no estaba: en ideologías obsoletas, ya que el número16 nos habla
de falta de entendimiento, de nostalgia, de crueldad. No es extraño que en tal
energía hayan emergido los populismos, que no son más que una muestra de
soberbia intelectual, es decir, imposición de las ideas propias y de
intolerancia a quien no piense como uno mismo.
Esta falta de
entendimiento y la incapacidad de llegar a cuerdos que ha traído el 16, junto a
ser año 9, que son años lentos en los que se vive de las rentas de lo creado a
lo largo del ciclo, ha sido especialmente acusado en España, con un gran
bloqueo en lo político que ha hecho difícil llegar a acuerdos. Imposible
entenderse por no haber voluntad de consenso, sino de imposición.
El 2016 nos
trajo también el Brexit, otra manifestación de falta de entendimiento, de
nostalgia, de defensa de lo conocido ignorando el nuevo curso de los tiempos,
aunque ello signifique el empobrecimiento y el aislamiento. Y el 2016 también
ha sido favorable para un nuevo gobernante en los Estados Unidos que rompe con
su tendencia anterior. Queremos crear un orden más justo, pero no hemos estado
conectados con la energía que resuelve, si no con la que alborota.
A lo largo de
este nuevo ciclo que comienza, se irá disipando ese afán revolucionario y se
irán aclarando las mentes y disolviendo la intolerancia, lo que hará posible un
cambio real, basado en ceder, aceptar y encontrar el verdadero entendimiento,
el verdadero consenso.
Repaso ahora
el pronóstico del 2016 en el que hablaba de pérdidas, de falta de
entendimiento, de dificultades para ponerse de acuerdo y veo como siempre lo
mucho que los números nos guían y orientan y lo certero de su información.
Los años 9
como lo fue el año que ya nos deja, también son años para vivir de las rentas
de lo cosechado a lo largo de este ciclo, y en España ha habido un parón en lo
económico en el que así ha sido, hemos vivido de lo cosechado anteriormente sin
que apenas entrara nuevo capital (inversiones paralizadas, etc.)
Dije que los
años 9 son años para dejar atrás personas y situaciones y en mi misma y en
algunas personas cercanas ha sido así, pues al tratarse de un año 9 de fin de
ciclo, se hacía espacio para lo nuevo que entra a lo largo del años 2017 que
sin duda es un año mucho mejor que el que ahora pronto nos deja.